No es el precio. Es cómo lo cuentas.
El error más común (y más caro)
La mayoría de emprendedores, cuando ven que su competencia ofrece lo mismo, hacen esto:
👉 Bajan el precio.
👉 Prometen más cosas por el mismo dinero.
👉 Y acaban trabajando el doble… para ganar la mitad.
¿Resultado?
💸 Atraes clientes que solo buscan barato.
🧠 Tienes que explicar lo mismo una y otra vez.
😫 Te agota justificar tu valor porque estás en modo “defensa”.
Ese no es el camino.
¿Y si, en vez de bajar el precio, subes la claridad?
Porque el problema no es lo que vendes.
Es cómo lo estás contando.
Y en un mercado saturado, eso es una ventaja.
Si todo el mundo dice lo mismo, destacar no es cuestión de inventar algo nuevo.
Es cuestión de decirlo diferente.
¿Cómo me aprovecho yo de la competencia?
Te lo cuento sin filtro:
Cuando alguien me pide presupuesto, no me da miedo decirle:
“Compara. Mira otras opciones. Solo asegúrate de que quien lo haga sepa de lo que habla… y no esté vendiendo algo que aprendió en un tutorial de 20 minutos.”
Eso es una antiventa.
Pero funciona como cierre.
Porque:
✅ No muestro necesidad.
✅ Pongo la pelota en su campo.
✅ Y de paso, lo ayudo a evitar una mala decisión.
Esto te posiciona con autoridad.
Y convierte desde la confianza, no desde la presión.
Todos dicen lo mismo. Di tú algo diferente.
Todos dicen:
👉 “Posiciona tu marca como referente en tu sector”
Tú puedes decir:
🧠 “No necesitas parecer un gurú. Necesitas que tus textos hablen como tú y vendan por ti cuando tú no estás.”
Porque eso es lo que quiere el cliente.
Confianza.
Cercanía.
Claridad.
No humo.
No posturas.
Y desde luego, no el mismo mensaje disfrazado con otra tipografía.
Herramientas para encontrar tu diferencia
Si no sabes por dónde empezar, te dejo dos herramientas que uso a diario:
🔍 Google Keyword Planner
Para ver qué busca realmente tu cliente.
❓ Answer The Public
Para descubrir qué preguntas se está haciendo antes de comprar.
Cuando sabes lo que quiere…
puedes dejar de adivinar y empezar a comunicar con intención.
Conclusión: el producto puede ser el mismo. La venta no.
Puedes ofrecer lo mismo que otros.
Pero si lo cuentas con claridad, sin copiar, sin adornos y con intención…
Vas a vender más.
Y a mejor precio.
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