Storytelling y copywriting: cómo contar la historia de tu empresa sin sonar a vendedor de crecepelo

¿Por qué tu marca no conecta (aunque ofrezcas algo bueno)?

No es por el logo.
No es por los colores.
Ni siquiera por el precio.

Es porque nadie sabe por qué haces lo que haces.
Porque tu historia está guardada en un cajón…
y eso hace que tu marca suene igual que todas.

¿Qué es el storytelling aplicado al copywriting?

No es hacer poesía.
No es escribir tu currículum con frases de LinkedIn.
Y desde luego, no es llenar tu web de “valores” que nadie siente reales.

Storytelling es mostrar tu recorrido, tus caídas, tus decisiones.
Es construir una historia que hace que tu cliente piense:

“Este tío entiende lo que me pasa… y sabe cómo ayudarme.”

Y cuando logras eso,
no vendes desde la presión.
Vendes desde la conexión.

¿Y si mi historia no es épica?

Mejor.

Porque la gente no conecta con superhéroes.
Conecta con humanos.

No necesitas haber salido de la pobreza extrema para tener una historia que valga la pena.
Solo necesitas mostrar el punto de partida, el conflicto y la transformación.

Eso, contado con las palabras adecuadas,
vale más que cualquier descuento.

Cómo usar el storytelling en tu web, tus redes o tus emails

🧱 En la página “Sobre mí”

No pongas:

“Somos un equipo multidisciplinar con más de 10 años de experiencia…”

Pon:

“Empezamos con más miedo que recursos. Hoy ayudamos a otros a evitar los errores que ya cometimos.”

Humaniza.
Conecta.
Y luego sí, demuestra.

✉️ En tus secuencias de bienvenida

Cuenta por qué haces lo que haces.
Cómo llegaste ahí.
Y por qué eso les afecta a ellos.

El lector tiene que sentir que no eres otro más vendiendo lo mismo.

📱 En tus publicaciones

No pongas solo “valor”.
Pon contexto.
Pon vivencias.
Pon lo que te costó entender lo que hoy enseñas.

La historia no es relleno.
Es la estructura que sostiene el mensaje.

¿Por qué funciona el storytelling con copy?

Porque las historias no se escanean,
se leen.

Y cuando te leen, te escuchan.
Y cuando te escuchan, te creen.
Y cuando te creen…
confían.

Y la confianza, amigo, es la antesala de la venta.

¿Y si no sabes por dónde empezar?

Ahí es donde entro yo.

He ayudado a marcas personales, negocios locales, artesanos, coaches, fisioterapeutas, escayolistas y emprendedores con ideas locas…

A convertir su historia en su mejor argumento de venta.
Sin postureo.
Sin sobreactuar.
Y sin sonar a infocomercial.

Conclusión: tu historia no es un adorno, es tu ventaja

Si estás cansado de que nadie conecte con tu marca,
de que te pregunten “¿y tú qué haces exactamente?”
y de escribir textos que no dicen nada…

Empieza por contar tu historia.